Los 3 desas-tres más comunes Copy

Los 3 ‘desas-tres’ más comunes se producen cuando…

1…sigues las creencias y suposiciones
Consideras que la almohada más cara o de moda es la “mejor” sea o no la que necesitas. También consideras que la almohada sirve para sostener tucabeza, cuello, incluso parte la caja torácica.

Debes considerar
Que el precio no garantiza que se ajuste a tu necesidad. Nadie mejor que tu sale lo que necesitas. Es mejor que te preguntes… ¿Para qué sirve la almohada? y ¿Dónde colocarla?

… es considerarla un elemento de uso “soporte”, y de la misma manera que dispones de varias camisas y zapatos que se adaptan a las circunstancias, también debes dispones de varias almohadas que deben ajustar tu posición en cada ocasión.
La postura varía constantemente dependiendo de la actividad del día y más en este periodo de aprendizaje, podrás comprobarlo.
Otro cambio que vas a incorporar es liberar la ropa de cama por la parte baja de los pies antes de entrar en ella para dormir.
Es necesario que tus piernas y pies puedan moverse con libertad. Durante el día ordena la cama como consideres.

2… renuncias a nuevas y mejores posibilidades cuando justificas tus hábitos inadecuados
Si habitualmente te cuesta dormir, las razones pueden ser varias. Pero no des nada por hecho y empieza por descartar factores fáciles. Revisa y comprueba tus soportes “almohadas” para dormir son de gran importancia y deben ajustarse a tu necesidad, de lo contrario la tensión se resistirá a abandonarte y puedes levantarte incluso peor.

Debes considerar
Que para dormir y descansar bien, lo primero es crear sin prisa un escenario tranquilo y adecuado con tus protocolos cada noche, y más cuando tienes dificultades de sueño.
Prescinde del TV y aparatos electrónicos, incluso cuestiona la lectura.
La habitación estará ventilada, con la temperatura y oscuridad que para ti sean confortables.
Utiliza ropa de cama limpia y a tu gusto en textura y color, incluso utiliza perfume de plantas o fresco. Ten a mano distintas almohadas que te ayuden a ajustar tu posición cada noche dependiendo de tu necesidad. Acepta que será variable dependiendo de la actividad diaria realizada. Debes saber elegir en cada ocasión, dónde y cómo utilizarla y olvida la errónea idea de una almohada para muchos años…

3…!Confía en ti hasta conseguir tu objetivo…!
El descanso y el sueño no deberían ser algo rutinario, que incluso se piensa con la incertidumbre de que pasará.

Debes considerar
El momento previo al sueño como un momento amable para contigo mismo sea compartido o no, para despedir el día antes del descansar e iniciar otro nuevo lleno de posibilidades.
Por tanto es un momento para reconectar contigo a través de tu respiración hasta encontrar la paz, soltar tensión y conseguir un descanso sereno y reparador.

Estos y otros puntos importantes, los revisaremos a continuación.